El Tai Chi y el Chi Kung son disciplinas que se enfocan en el flujo libre de la energía vital o “Qi” a través del cuerpo para lograr un mejor bienestar físico y mental. Estas prácticas pueden aumentar la fuerza muscular y vitalidad, mejorar la concentración y reducir el estrés, fortalecer las extremidades superiores e inferiores, mejorar la salud cardiovascular y respiratoria, prevenir lesiones y caídas, mejorar la memoria y la agudeza mental, regular la presión arterial y son adecuadas para todas las edades y niveles de condición física.